jueves, 2 de junio de 2016

LA MUJER DE LOS PERROS



LA MUJER DE LOS PERROS.





  
El perro es considerado el mejor amigo del hombre, pero si eras prisionero de un campo de concentración nazi, los perros eran parte de tu miedo diario.

Los alemanes usaron millones de perros durante la II guerra mundial,  de diversas razas pastores alemanes, Boxer, Doberman, Mastín  o  Rotweiller.

Hicieron todo tipo de trabajos, pero en los campos de exterminio y entrenados por malas manos  se convirtieron en asesinos despiadados.

El adiestramiento consistía en  que los animales supieran quien era el enemigo. Para eso el preparador de perros se ponía un uniforme  de preso acolchado y maltrataba al perro (asi sabían a quien odiar).

  Lógicamente, en cuanto los perros veían a un preso con su uniforme a rayas lo asociaban con  el dolor y querían atacar.


 
 "Un SS junto a su pastor aleman"




Una  chica apocada.

Juana Bormann, nació en 1893,  en Birkenfelde, Alemania ,  de su juventud se sabe muy poco, tan solo que era  de pequeña estatura, apocada, y que trabajo en una clínica psiquiátrica.

En 1938, y por causas económicas se unió a las SS, y acabo de guardia de un campo de concentración.  Su primer servicio lo realizo en Lichtenburg. Un Antiguo castillo convertido por los nazis en una prisión. En un inicio dio cobijo a los traidores de las SATras "la noche de los cuchillos largos". Pero en 1937, fue cerrado brevemente. En 1938 abrió  sus puertas y Juana Bormann empezó a trabajar en el. 

Debido a la escasa formación de Juana comenzó trabajando en las cocinas del campo dirigiendo a presas de vez en cuando, pero no desarrollo ninguna actitud violenta como haría después.

En 1939 Bormann fue trasladada al campamento cercano de Ravensbrück, donde sirvió hasta 1943, la apocada Bormann empezó a acompañar a los  Kommandos de  prisioneras, que trabajaban fuera del campo. Con su uniforme de Aufieherin(supervisora), se paseaba entre las filas de presas.  Y empezó a cogerle gusto a golpearlas con su porra de goma y a dar puñetazos , a cualquiera que la desafiara con la mirada.
 
 
"Soldados alemanes en el frente oriental
junto a sus perros"

Una mujer y su perro.

Para 1943, Juana se había convertido en una autentica asesina, se paseaba con un perro lobo tan grande como ella y no dudaba en soltarlo para que despedazara  a las prisioneras, por si fuera poco fue destinada al campo de Auschwitz Birkenau.

En el más mortal campo de concentración Bormann  puso en práctica todas las aberraciones que tenía en la cabeza, incluso se atrevía a participar en la selección (elegir entre los presos que iban a ser gaseados o destinados a trabajar)  y aconsejaba  a los propios médicos con frases como “ Se la ve débil para trabajar”.

 Juana continuo acompañando a las presas  en su trabajo diario, cualquier signo de debilidad era suficiente para que soltara a su enorme perro, Como le paso a Regina una joven judía de 18 años que murió en la enfermería tras días de agonía por la infección creada por las  mandíbulas del perro de Bormann.

Otra de las torturas de Bormann era desnudar a las presas y obligarlas a que hicieran ejercicios agotadores, mientras las golpeaba con un palo o con su porra de goma. La chica  tímida de la  voz bajita, se había convertido en una autentica psicópata.

Una persona que la conoció bien fue una doctora austriaca que la conoció en Auschwitz   y la describió de  la siguiente forma.

“Ella era miserable, una criatura infeliz que no fue amada por nadie, que no amaba a nadie salvo a su perro”

Para 1944 Bormann ya era una autentica pesadilla, raro era el dia que no matara hasta 3 presas , y la enfermería del campo estaba llena de prisioneras con horribles mordeduras en las piernas.

  A finales de 1944 los soviéticos se acercaban al campo de Auswitch, y este fue siendo evacuando sus presos al  centro de Alemania, Bormann fue destinada de nuevo a Ravensbruck.


 
 
"Hombres de las SS, durante un despliegue".

Ultimo destino.

En marzo de 1945, fue  enviada a su ultimo destino el campo de concentración de Bergen Belsen, a las órdenes del comandante  Josef Kramer.

La situación del campo en  la parte final de la guerra era dantesca.  A parte de los presos ordinarios que tenia, llegaron decenas de miles evacuados de los campos del este, en Bergen Belsen, había cerca de 90.000 prisioneros, pasando hambre y todo tipo de privaciones.

Bormann mientras tanto seguía con su rutina, paseo entre las presas, palizas, y lanzar a su perro a la mas mínima oportunidad.  Cuando Juana se percato que uno de sus camaradas, el Unsterscharführer Tauber, se “fijo” en una jovencita judía, no dudo en despedazarla con su perro aprovechando un recuento.

 A mediados de abril de 1945, los británicos liberaron el campo de Bergen-Belsen.  Donde se encontraron  con miles de cadáveres, y unos 50.000 supervivientes que paseaban como muertos vivientes.

Los británicos obligaron al antiguo personal del campo(entre ellos Juana Bormann) a cargar e incinerar a los prisioneros muertos .  Se contabilizaron mas de 10.000 cadáveres.

 
  
"Juana Bormann, tras ser detenida en 1945". 


 Posteriormente Juana Bormann fue encarcelada, y a finales de 1945 fue juzgada y ahorcada, la cantidad de pruebas y testimonios contra ella fueron decisivos. Se calcula que la mujer de los perros asesino a mas de 500 prisioneras.

  
FUENTES.
GUARDIANAS NAZIS. Monica G, Alvarez.
WIKIPEDIA.